En su compromiso con la protección de la niñez y adolescencia, así como con el bienestar de sus equipos de trabajo y la transparencia en el uso de los recursos, Fundación Tierra de Esperanza continúa reforzando la promoción de un modelo de prevención de delitos como parte de su gestión.

María Eugenia Arellano, encargada de prevención de delitos, señaló que “incorporar la cultura preventiva en nuestra organización no es algo nuevo, es un estándar que Fundación Tierra de Esperanza viene promoviendo desde siempre en sus equipos de trabajo, tanto para el cuidado de la niñez y adolescencia como para el buen uso de los fondos públicos,” afirmó . Este enfoque preventivo también busca generar un impacto positivo en la disminución de riesgos asociados a incumplimientos normativos y éticos que podrían derivar en la comisión de delitos.

La cultura preventiva es vista como un pilar fundamental para la Fundación y la profesional agregó que “la cultura preventiva impacta positivamente porque permite a los equipos fortalecerse como comunidad en la forma de pensar y actuar, enfrentando riesgos y desafíos institucionales para garantizar resultados que perduren en el tiempo”. De esta forma, las capacitaciones en torno al tema continúan realizándose en la organización y difundiendo a través de un afiche la importancia que reviste.

Este enfoque no solo beneficia a las y los trabajadores, sino también a los niños, niñas, adolescentes y familias que son atendidos por la institución. Esto asegura que todos los involucrados estén informados y participen activamente en la prevención, alineados con la misión institucional de Tierra de Esperanza.